La Internet Industrial de las Cosas (IIoT) sigue dominando el panorama. Pero, sobre todo, la IIoT sienta las bases de las nuevas tendencias y técnicas que revolucionarán el mantenimiento industrial hasta 2030.

Industria 4.0 e IIoT: ¿cómo se están adaptando los pioneros?

¿Es demasiada la expectación que genera la IIoT o realmente vale la pena? No nos tomamos mal la pregunta. Es cierto que la transformación digital es un reto para la mayoría de las empresas y requiere muchos esfuerzos de actualización. Es normal que tengas tus dudas, y por eso hemos hecho esta investigación para ti. Un reciente estudio de McKinsey sugiere que las empresas que implementaron la Industria 4.0 antes de la pandemia estaban mejor preparadas para gestionar los problemas y responder a diversos escenarios.

Por otro lado, las empresas que se quedaron atrás en la Industria 4.0 se encontraron con que no tenían la infraestructura digital adecuada para aguantar el confinamiento. Y por si fuera poco, también descubrieron lo difícil que es implementar nuevas herramientas de trabajo en medio de una pandemia. En resumen: la inversión en Industria 4.0 e IIoT dio sus frutos en 2020. Seguir retrasando esta transición sólo hará más difícil recuperar el tiempo perdido en el futuro.

La tecnología avanzada entra en escena

“Tecnología avanzada” es un término que engloba a las tecnologías que todavía tienen pocos usuarios pero que muestran un gran potencial. Piensa en cosas como la Inteligencia Artificial, el reconocimiento de voz, la realidad virtual o la visualización en 3D, por ejemplo. A pesar de ser tachada de “inmadura”, la tecnología avanzada ya había causado un “revuelo” en el mantenimiento industrial en 2020. Según un estudio, el 17% de los responsables de mantenimiento ya utiliza algún tipo de tecnología avanzada y otro 47% tiene intención de utilizarla en los próximos 3 años.

Sin embargo, un reciente estudio de McKinsey ha demostrado que la adopción de tecnología avanzada en las operaciones se ha acelerado 25 veces debido a la pandemia de COVID-19. A medida que estas tecnologías mejoren y sean más asequibles, asistiremos a una revolución en las fábricas a todos los niveles, incluso en el mantenimiento. Y debido a la COVID-19, probablemente antes de 2030.

Encuentros cercanos con datos almacenados en la nube

La IIoT y la tecnología avanzada contribuyen a la recogida automática de datos, que se almacenan en la nube. Este avance tiene dos consecuencias inmediatas: poder comprender mejor el estado de los equipos y predecir los daños.  En el estudio que hemos mencionado anteriormente, el 70% de los gestores esperaba utilizar el mantenimiento predictivo para reducir el downtime, mientras que el 60% confiaba en el mantenimiento centrado en la fiabilidad.

Pero este no es el único “encuentro cercano” que los gestores de mantenimiento industrial tendrán con el análisis de datos almacenados en la nube. Además de predecir los daños, utilizaremos estos datos para proyectar el retorno sobre la inversión, el rendimiento y la calidad. Gracias a ello, los simuladores serán cada vez más sofisticados y precisos, y esto se convertirá en una herramienta indispensable para la resolución de problemas.

Nuevos modelos de suscripción y pay-per-use en el mantenimiento industrial

Las nuevas tecnologías abrirán el camino a nuevos modelos de negocio en el mantenimiento industrial y la asistencia técnica. Las máquinas con IIoT pueden enviar actualizaciones a los fabricantes, activando las solicitudes de asistencia y mantenimiento cuando los niveles de rendimiento caen o se producen daños. No estamos únicamente explorando el territorio del mantenimiento basado en la condición – es todo un modelo de mantenimiento alternativo.

El mantenimiento industrial y las reparaciones por suscripción ofrecen ahora el “Mantenimiento como servicio”, o MaaS. Algunos fabricantes pueden crear sistemas de leasing o alquiler y establecer sistemas de pay-per-use. Esto es especialmente prometedor para las empresas más pequeñas o que no pueden invertir en smart technology muy cara, porque les da la oportunidad de “seguir competitivos” sin endeudarse.

La era de las reparaciones virtuales y de la realidad aumentada

Es imposible concebir el futuro del mantenimiento industrial sin imaginar cómo será la “fábrica del futuro”. A medida que las empresas empiezan a depender del trabajo a distancia para seguir siendo resilientes y flexibles, puede parecer que el mantenimiento se queda atrás. ¡Pero no por mucho tiempo! A finales de la década, los fabricantes y los proveedores podrán utilizar la realidad aumentada para formar a los operadores en casi todo, desde las medidas de seguridad hasta la configuración de los equipos.

Un equipo con más experiencia también puede utilizar esta tecnología para supervisar varias propiedades o prestar asistencia a distancia – algo como una supervisión virtual de las reparaciones. Es una invitación abierta al mantenimiento remoto y a las reparaciones descentralizadas, y empresas como Boeing ya están aplicando con éxito este tipo de técnicas.

Una combinación perfecta: fabricación aditiva y mantenimiento

La fabricación aditiva (quizás más conocida como “Impresión 3D”) se utilizará para imprimir piezas de repuesto de forma inmediata. En cuanto un técnico detecte una avería – ¡o la máquina la diagnostique! – puede imprimir una nueva pieza y sustituirla inmediatamente.

Esto lo cambia todo, empezando por una gestión más eficaz de las existencias. Los gestores pueden por fin relajarse respecto a las limitaciones de espacio, la falta o el exceso de existencias. Pero, sobre todo, la fabricación aditiva nos acerca a nuestro objetivo final: cero downtime. Y ese ha sido siempre el objetivo, ¿no?