Sea sincero: ¿cuántas veces ha dicho “cuando esto termine” o “cuando esto pase” en los últimos días? Una de las cosas que más hacemos durante la cuarentena son planes. ¿Qué pasará después? ¿Cómo trabajarán las compañías cuando la pandemia termine?

 

El día después de la cuarentena probablemente no será como lo imaginamos. La lucha contra la COVID-19 es una carrera de fondo, por lo que nuestra supervivencia depende de nuestra capacidad de adaptación. Aquí están nuestras mejores predicciones y algunas ideas para superar un distanciamiento social que puede extenderse mucho más allá del pico esperado en España.

¿Habrá un segundo brote de COVID-19?

Nadie tiene una bola de cristal para predecir el futuro. Pero sabemos que cuando pasemos el pico de la epidemia y el número de nuevas infecciones al día empiece a bajar, será gracias a las medidas de contención y no porque el nuevo coronavirus haya “desaparecido”. El SARS-CoV-2 (el virus que causa el COVID-19) seguirá circulando y transmitiéndose por todo el mundo. Por lo tanto, existe la posibilidad de un nuevo brote cuando se levanten las medidas de contención.

 

¿Pero ha ocurrido algo así alguna vez? Sí. La gripe española de 1917-1918 tuvo tres olas a lo largo de dos años. La segunda fue especialmente mortal, primero porque el virus había mutado; luego porque coincidió con los últimos meses de la Primera Guerra Mundial, lo que hizo que los soldados llevaran el virus por todo el mundo. O sea, terminó afectando a regiones que habían escapado “indemnes” a la primera ola y que no habían desarrollado la inmunidad de grupo.

 

Hablando ahora de Wuhan, 2020, un estudio de Lancet concluyó que levantar las medidas de distanciamiento social prematuramente podría causar un segundo brote de COVID-19 ya en agosto. El retorno progresivo de la población activa a la vida normal es la mejor manera de retrasar un segundo pico de contagio y “ganar” tiempo para aislar a los grupos de riesgo, mejorar la respuesta de los sistemas de salud y desarrollar una vacuna eficaz a gran escala, lo que podría tardar unos 18 meses.

 

¿Cómo podremos volver a la vida normal después de COVID-19?

A pesar de todo, el conocimiento que tenemos sobre el SARS-CoV-2 es todavía escaso. Todos los escenarios asumen un comportamiento similar al de otros coronavirus. Por lo tanto, la mejor manera de planificar la poscuarentena es mirar a los territorios que ya controlan el virus y que están volviendo ahora, poco a poco, a la vida tal y como la conocíamos – Wuhan, Macao, otras provincias chinas y Corea del Sur.

 

Cómo preparar su empresa para la poscuarentena

Con los conocimientos que tenemos hoy en día sobre el SARS-CoV-2 y el COVID-19, dejamos a continuación algunas de las mejores medidas que puede tomar en su empresa al volver al trabajo después de la cuarentena.

 

Regreso progresivo al trabajo después de la cuarentena.

Prepare un regreso progresivo al trabajo después de la cuarentena. Empiece por reabrir sólo con “servicios mínimos” presenciales y permita que todos los demás trabajadores hagan teletrabajo. La parte positiva es que, mientras tanto, su equipo ha afinado todos los detalles para trabajar y comunicarse bien a distancia.

 

Dibuje, además, un perfil de su equipo: los primeros en volver deben ser los curados (si se confirma que tienen anticuerpos contra el virus y que no puede haber reinfección), seguidos por los jóvenes sanos y otros grupos de edad sin patologías asociadas. Dispense a los grupos de riesgo del trabajo presencial (mayores de 60 años, personas con diabetes u otras enfermedades autoinmunes, enfermedades cardiovasculares, problemas oncológicos, asma y diagnosticados con EPOC).

 

Equipos trabajando en espejo.

El trabajo en espejo es una de las recomendaciones para asegurar la atención en las residencias de ancianos durante el brote. Es decir, por cada trabajador en activo, hay alguien “de guardia” disponible para sustituirlo en caso de que tenga que permanecer en aislamiento profiláctico. Esta puede ser una solución para los equipos de housekeeping y las empresas de asistencia técnica que tratan de cumplir con todos sus Acuerdos de Nivel de Servicio (SLA).

 

Haga un cronograma para la rotación del trabajo presencial.

Si quiere reunir al equipo presencialmente, tenga en cuenta el número máximo de personas que pueden ocupar la oficina sin desrespetar la distancia de seguridad de al menos dos metros en espacios cerrados. Una solución puede pasar por crear un cronograma rotativo en el que no todos los equipos trabajen presencialmente al mismo tiempo. Por ejemplo, el equipo de marketing puede reunirse y ocupar la oficina en la primera semana del mes, el de I+D en la segunda semana, y así sucesivamente. Los espacios deben ser siempre aireados y deben evitar la recirculación de aire a través del sistema de aire acondicionado.

 

Prepare una reserva estratégica de material.

Además de las medidas de distanciamiento social, la mejor manera de prevenir la propagación del virus es lavarse las manos. Aumente las reservas de alcohol en gel (con una concentración de al menos un 60% de alcohol) y ponga estos desinfectantes a disposición en puntos estratégicos como puertas y ascensores – esta estrategia ha sido muy eficaz para contener el virus en Taiwán y recupera los principios utilizados para combatir el virus H1N1 en 2009. Dependiendo de su área de operación, también debería preparar una reserva, o al menos asegurar un suministro continuo, de guantes de nitrilo y otros materiales de protección.

 

Zonas de desinfección y servicio de lavandería.

Para la seguridad de todos, cree un área donde sus trabajadores puedan quitarse los uniformes y deshacerse de los materiales potencialmente contaminados, como guantes y máscaras. Si es posible, los uniformes deben lavarse a altas temperaturas (60 – 70ºC) y cambiarse todos los días.

 

→ Saber más sobre cómo protegerse del contagio de COVID-19 en el trabajo.

 

Reducir los desplazamientos por trabajo.

Reduzca al mínimo los desplazamientos por trabajo. Intente proporcionar más apoyo a sus compañeros, empleados y clientes de forma remota, aunque esto signifique producir instrucciones más completas o guías DIY (“hágalo usted mismo”) para reparaciones sencillas. Considere la posibilidad de implementar soluciones sin contacto. Mantenga las reuniones por videoconferencia y haga que sus vendedores se hagan expertos en ventas internas. Dispense los viajes no esenciales, especialmente si son a países donde todavía hay transmisión activa del virus. Puede que haya una curva de aprendizaje aquí, pero con todas las soluciones tecnológicas que tenemos, sólo hay que encontrar las herramientas adecuadas.

 

Siga las orientaciones de las autoridades.

La Organización Mundial de la Salud ha publicado una serie de orientaciones y guías para lugares de trabajo. Muchas de estas acciones seguirán siendo necesarias en los próximos meses para prevenir un segundo brote de virus, por lo que tiene sentido leerlas para planificar su regreso al trabajo.

 

Infraspeak seguirá publicando más artículos sobre cómo reaccionar ante la epidemia de COVID-19 y la gestión de crisis para los gestores de instalaciones. ¡Queremos que los planes que están haciendo durante la cuarentena no se queden en el papel! Suscríbase a nuestro newsletter y manténgase atento a nuestro blog para acceder a todos los recursos que tenemos disponibles sobre el nuevo coronavirus.